Cada vez se consumen más aparatos y se sustituyen con mayor velocidad por otro nuevo, reducir el consumo es una medida preventiva, que intenta disminuir el número de toneladas de desperdicios a reciclar.
-Reutilizar el producto:
Los expertos en reciclaje electrónico recomiendan que amigos o familiares hereden los aparatos que todavía funcionan, o que se vendan en el mercado de segunda mano.
-Reciclar:
Cuando el producto ya no funciona y no hay posibilidad de ser utilizado por alguien cercano, se debe optar por el reciclaje. El consumidor puede entregar el aparato viejo en el establecimiento donde está compra uno nuevo. La tienda está obligada por ley a recogerlo, sin importar marca o modelo.
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